Jeonju “전주”, la Capital Gastronómica de Corea del Sur
Relatos de una viajera…
Después de empezar a perderle el miedo a los trenes 😂, me lleve a mis amigas a la ciudad de ¡¡Jeonju!! “전주시”
Salimos muy temprano hacia la estación Jongsan en Seoul para tomar el KTX (Korea Train Express) y en una hora y media, más o menos, estábamos en la capital de la provincia de Jeollabuk-do, pero no sólo es eso, Jeonju es la Capital Gastronómica de Corea del Sur o la Ciudad del Sabor como la considera la UNESCO dentro de su red de Ciudades Creativas.
Esta es la vista saliendo de la estación de Jeonju.
Como dije, en esta ocasión nos trasladamos en KTX y es toda una experiencia viajar en él, es muy rápido, cómodo y lo más importante… ¡nadie nos bajó! jajaja llegamos sin problemas, estaba muy contenta de poder cumplir con el itinerario que planee.
Quise tomar una foto al tren y sin querer obtuve un modelo, el señor sin pedírselo posó con gusto para mi fotografía.
Algo que nos sorprendió al llegar, fue que en el módulo de información de turismo que está en la estación, encontramos un folleto y el mapa de la ciudad ¡en español!, me encantó eso, me sentí especial porque nunca falta la información en inglés, japonés o chino, pero en español hasta ahora no habíamos visto nada.
Jeonju es una ciudad que descubrimos por un video de un canal de YouTube, teníamos muchas ganas de conocerlo y lo incluí en el itinerario de nuestro viaje, pues perecía ser un lugar muy bonito y no nos decepcionó, esta ciudad es muy popular entre el turismo local y creo que muy poco conocido por el turismo extranjero
Saliendo de la estación de trenes nos dirigimos a la parada de autobús para ir a la aldea Hanok de Jeonju “전주한옥마을” y no pude evitar esta foto, me encantó la peculiaridad de esta parada de bus, se veía muy bonita y original.
El autobús que tomamos nos dejó frente a la Puerta de Pungnam “풍남문”, un lugar imponente en medio de una ciudad muy tranquila y pintoresca, que de acuerdo con lo que investigue, es la entrada sur a la fortaleza que protegía el castillo del gobernador provincial durante la dinastía Joseon. Caminamos un poco por los alrededores, viendo las tiendas y los restaurantes que comenzaban a abrir.
Lejos de lo que muchos pudiéramos pensar, en Corea del Sur existen diferentes religiones, entre ellas la católica. Esta es la Catedral Jeondong de Jeonju (전주전동성당) considerada tesoro nacional, tiene un estilo muy occidental y está muy bonita por fuera y por dentro.
Después de la catedral llegamos caminando al Santuario de Gyeonggijeon (경기전), un lugar perfecto para tomar muchas fotos, es un lugar obligatorio de visitar, está rodeado de árboles hermosos y bambúes, una vez más el otoño le da un toque especial. El clima estaba muy a gusto para recorrerlo y no sé si fue por la hora, pero había muy poca gente, así que fue un recorrido muy tranquilo.
Gyeonggijeon es famoso porque ahí está el retrato del rey Lee Taejo, el fundador de la dinastía de Joseon, por lo que es un lugar lleno de historia.
Mientras andábamos recorriendo Gyeonggijeon. se nos acercaron estas chicas para pedirnos que les tomáramos una foto, se las tomé y les pregunte si les podía sacar foto de sus peinados, se me hicieron super “cute”, ellas aceptaron amablemente. Había mucha gente que andaba usando hanbok (traje tradicional coreano) y se tomaban muchas fotos, pues existen lugares para rentar esta vestimenta. Yo quería sacar foto de todo, así que tengo muchas que fue difícil escoger algunas, pues a donde quiera que volteas hay paisajes muy bonitos, rodeados de árboles y plantas.
Saliendo de Gyeonggijeon, te encuentras inmerso en el pueblo Hanok de Jeonju, 😍 un lugar padrísimo con casas tradicionales coreanas, mucho más extenso que Bukcheon Hanok Village en Seoul. En esta aldea, puedes vivir la experiencia de dormir en alguna de las casas, hay varios lugares para rentar alojamiento. También encuentras muchos lugares para comer, principalmente Bibimbap, que es un platillo muy famoso de Corea de Sur y más famoso el de Jeonjuo o probar Makgeolli, bebida tradicional de Corea.
No es raro ver afuera de algunas casas tradicionales pequeños negocios de manualidades o souvenirs muy bonitos. Lo que me llamó la atención y se me hizo muy interesante, es que ¡no hay nadie atendiéndolos!, si algo te gusta simplemente ves el precio (todo esta etiquetado) y dejas el dinero en una cajita que está ahí ¡y listo! Te cobras tu sólo 😉 Me encanta esa sensación de confianza, seguridad y respeto que encuentras en muy poco países, me gustaría que aprendiéramos un poco de eso en Latinoamérica 😉
Jeonju Hanok Village es un lugar visitado por mucha gente, sin embargo, es un lugar muuuy limpio; es sorprendente la limpieza de sus calles a pesar de haber muchas tiendas de comida callejera.
Todas las tiendas y restaurantes tienes el estilo arquitectónico tradicional coreano, te transporta a otra época porque además ves a muchas personas usando hanbok
Como ya había mencionado, me encanta caminar, disfruto del hiking y en cuanto veo subidas, escaleras o algo así quiero saber qué hay del otro lado. Así que después de caminar por las callecitas de Jeonju Hanok Village, fuimos a dar a los pies de una colina y vi una entrada para subir.
Mis amigas definitivamente me dijeron: – si quieres ve tú y aquí te esperamos – yo sentía pena dejarlas ahí esperándome, pero también moría de ganas de subir, finalmente como las vi convencidas de no subir y esperarme… emprendí el camino de subida ¡súper emocionada! Yo solo veía escaleras, veredas y poco a poco los techos de las casitas más chiquitos.
Yo iba fascinada disfrutando de paisaje y la naturaleza, ya empezaba a hacer calor, pues el sol estaba en todo su esplendor, pero no me importaba. Cuando llegue a la cima de la colina me encontré con Omokdae (오목대) sin saber que estaba ahí, es una construcción histórica donde los coreanos se reúnen para conversar, descansar y disfrutar del lugar. Definitivamente valió la pena la caminata y subida de escaleras, la vista desde arriba es muy hermosa, puedes ver la panorámica de todo Jeonju Hanok Village.
Después de sacar algunas fotos y reponer el aliento, emprendí el camino de regreso ya que me deba pena con mis amigas que había dejado abajo esperando. Obviamente la bajada fue más tranquila que la subida.
Baje de la colina, me reuní con mis amigas y ya todas teníamos mucha hambre, eran casi la 3pm así que fuimos a buscar que comer, queríamos probar todo. Primero llegamos a probar en Mungangjeong “문강정”, que son básicamente pedazitos de pulpo capeadas y aderezadas con salsa y queso, me supieron a gloria con el hambre que traía!! 😋 se ve que es un lugar súper famoso, pues había mucha gente.
También probamos Cheese Dak-kkochi “치스 닭꼬치”, una banderilla de pollo con queso, muy rico tambien y de postre, un rico helado de “철판내 아이스크림”, estaba delicioso y la peculiaridad es la forma en que te lo sirven, lo esparcen en una plancha congelada y luego lo hacen en rollitos, estaba buenísimo.
Seguimos recorriendo el lugar después de comer y fuimos a dar al Puente de Jeonju, que está frente al Gangam Calligraphy Museum. Aquí me tocó “pagar” el haber dejado a mis amigas esperando para subir la colina hasta Omokdae… Ellas se fueron a buscar un baño y me quede esperando… esperando… esperando… esperando ¡y esperando! Se supone que el señalamiento decía que el baño no estaba lejos… Por eso las dejé ir solas mientras yo tomaría fotografías ahí (cosa rara 😅).
Encontré la escena perfecta y a los modelos perfectos a lo lejos. ¡Me encanta esta foto!
El sol se empezaba a ocultar y yo seguía ahí esperando… por esa razón tengo miles de fotos de ese lugar, del puente, del museo, mías 😅, hasta de un templo budista que estaba en una montaña muy lejos y es que a pesar de que en Corea del Sur hay Wi-Fi gratuito en casi todos lados, nos costaba mucho conectarnos, así que no me podía mover de ahí para ir a buscar a mis amigas y no tenía manera de contactarlas… Después de casi una hora (lo sé por la hora de las fotos), ya estaba preocupada y desesperada porque se supone que el baño estaba a 50 m. Hasta que por fin a lo lejos las vi regresar… ¡creo que el baño se les escondió! jajaja Me arrepentí de no haberlas acompañado… Pagué la espera de la colina jajaja.
Bajo el puente en el que estaba esperando, hay un río muy lindo donde la gente camina y hace ejercicio a la orilla.
Definitivamente Jeonju Hanok Village es un lugar muy lindo y tranquilo que se antoja vivir aquí. Dimos un último recorrido antes de regresarnos a la terminal, nos faltaron lugares para conocer así que pretexto para regresar a Jeonju ¡si hay!
El ambiente que se vive en las calles es muy alegre, vimos a estos chicos amenizando la tarde, ojalá se hagan muy famosos porque cantaban muy bien.
Nos dirigimos a la parada de autobús para regresarnos a la terminal, así luce la terminal de Jeonju… 😍 muy linda tanto de día como de noche.
Regresamos muy contentas a Seoul y con ganas de seguir conociendo, como dije, faltaron lugares por conocer en Jeonju, pero espero que en un futuro no muy lejano pueda regresar.
Continuará…
JEONJU es hermoso y tanto que ver , comer y vivir allí, todo lo dicen las fotos están bien tomadas.
Muchas felicidades,,,,aplausos